Con Ye de Yuca

Los principios básicos del holismo nos enseñan que los alimentos endémicos están distribuidos de manera natural para asegurar en la humanidad el goce de la buena salud. En America, la yuca fue parte esencial del menú con el que se nutrieron numerosas comunidades nativas, quienes identificaron en este tuberculo una fuente importante de proteinas. Se cree que su origen está en la Amazonía sin embargo, las cronicas de un sinfín de exploradores registraron su presencia en diversos puntos de la geografia americana desde el suroeste de Estados Unidos hasta Argentina, dando como resultado una variedad melodiosa de nombres con que han bautizado al género manihot de la familia euphorbiacceae: Aipi, casava, manioc, boniato, manioca, tapioca, suahili, mhogo y omowgo, pero al fin de cuentas, yuca.
Esa raíz cilíndrica de aspecto leñoso esconde tras su piel la blancura de un alimento excepcional que ha sido protagonista en la alimentación caribeña por miles de años; sancocho de nuestro #CookingCartagena que se respete la contiene hervida, de color amarillo pálido pero con una textura que se deshace en tu paladar; cuando esta “rucha” se cocina, pero no tanto como para poder molerla y transformarla en la fantástica y crujiente carimañola que rellenamos de ese suave, jugoso pero firme queso característico de la costa, que estamos seguros te deleitara en nuestro premiado “Menú literario de García Márquez” #MenudeGabo. Si hablamos de cómo se adapta en forma y sabor a cada región de Colombia, nuestro viaje tendría que empezar en el Amazonas con ese extracto de la yuca brava de sabor intenso y picante que las abuelitas de Leticia envían a Bogotá para preparar uno de los clasicos de nuestra parada en Minimal, morrillo de res en salsa de tucupí amazónico, servido con yuca frita, casabe, hormigas y verdes frescos, una declaración de amor a la yuca que comemos cuando nos vamos de paseo de restaurantes por #ChapineroAlto. Sigue la ruta de sus deliciosos sabores emprendiendo ahora la aventura hacia los extremos meridionales del país donde su habilidad para alegrar potajes la hacen un ingrediente esencial en el sancocho de mulata paseadora del Pacifico o la sopa de tortuga de La Guajira; en el Valle del Cauca, son la base de sus tentempies más populares, buscala convertida en pasteles, empanadas, pandebonos o pandeyucas. Por ultimo reencuentrate con nosotros en Cartagena donde la degustaremos, una vez más, acompañando un exquisito brunch con pescado frito en #BazurtoFoodiesClub.
Ye de yuca, es una de las letras menos frecuentes del alfabeto en español pero en la gastronomía la dominamos transformando cada variedad de este tuberculo en un manjar, por eso no te sorprendas si te invitamos a probarla en dulces que conservan el tierno sabor a infancia como el enyucado que Florentino nos prepara en #SavoringPalenque o los panderitos que Mercedes exhibe en su puesto del Portal de los Dulces cuando la visitamos en nuestro #CartagenaStreetFood. Si la quieres en su versión original, siempre será una invitación dejarte tentar por simplemente una mocosa, suave, deliciosa y placentera yuca recién salida de la olla que solo espera un compañero para ser servida en el plato. En el Caribe colombiano los matrimonios gastronómicos son una tradición así que si un día quieres unir a la yuca en este santo sacramento te dejamos el secreto: Que sea con queso, suero o chicharron!
Melissa Hernandez

Melissa Hernandez

Chef Concierge de Cartagena

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